Últimamente la verdad es que me doy cuenta, antes ya lo hacía, de que estos últimos años en las majors americanas dedicadas a ganar pasta, todo se reduce a , si la producción da beneficios, perfecto, aunque lo que nos vendan sea una patata , si no los da, a la basura, o directamente no se hacen (algunas de las que deciden hacer, por ejemplo, Ben Hur son auténticos bodrios).
No es que estemos diciendo que estamos ante una película mala, no va por ahí la cosa, pero si que es evidente que hoy en día el tema rendimiento es básico para los estudios cinematográficos.
Como la saga que nos ocupa lleva unos números muy golosos, El código da Vinci, 630 millones de $ de beneficio neto, su "secuela" (es otro libro sin conexión con el anterior film) Ángeles y Demonios , 360 millones de beneficio neto, en total alrededor de mil millones de $, el realizar una tercera película sobre una obra de Dan Brown, era un caramelo difícil de no comer.
Este tipo de películas (como la mayoría hoy en día) depende para atraer al público a las salas de quien las protagonice. En este caso como no podía ser de otra manera Tom Hanks (" Salvar al soldado Ryan", " Esperando el rey") quien ya había interpretado al profesor Langdon en anteriores producciones retorna al papel, secundado esta vez por actores como Felicity Jones (" Un monstruo viene a verme") en una más que correcta performance como Sienna Brooks, Omar Sy ( "Intocable") como el agente Bruder a mi entender poco importante en pantalla, Ben Foster ("El único superviviente") como Zobrist, Irrfan Khan como "El provoste" Harry Sims, (sorpresa positiva en la peli) o incluso la doctora de la OMS Elizabeth Sinskey, interpretada de manera correcta por Sidse Babett Knudsen.
Evidentemente todos no tienen la misma importancia en la trama de la película, por lo que tampoco tienen el mismo tiempo en pantalla, pero la verdad es que hay algunos que ya sea por el guión (de lo más flojo del film) o porque no acaban de ser bien representados .
Otro de los problemas que tiene el film, es el nivel que presenta en este film Tom Hanks. Tanto en El Código Da Vinci, como en Ángeles y Demonios, te crees realmente a Hanks, aquí en cambio ya sea porque estamos ante el film de los tres que representan la trilogía de Brown con Langdon como protagonista (en realidad son cuatro con El Símbolo Perdido, no adaptado al cine) más flojo, o porque los años no pasan en balde, nos encontramos ante una actuación de Hanks en la que parece que vaya con el piloto automático puesto en modo ON. Quizás por ello cambian el final, porque es exigente en tema físico, pero la verdad es que no definiría este film como el mejor trabajo del actor de Concord, California.
Los demás actores, a excepción de la sorpresa positiva de Irrfan Khan, y del esfuerzo de Felicity Jones, son un tanto insulsos y poco atrayentes para quien mira.
Ben Foster como el "malvado" no sería como para que nos infunda intranquilidad e incluso miedo, que debería ser su propósito, aunque en la novela, no es el personaje con más líneas, creo que en el film, a través de flashbacks, debería haber tenido un poco más de peso.
Adapta la novela de Dan Brown, si, seguro??
Las adaptaciones cinematográficas están al orden del día, ya sea por falta de ideas, o porque tienen su rendimiento en taquilla al atraer a espectadores habituales de los libros. En este caso, no obstante, el guión escrito por David Koepp, se carga un personaje del libro que tiene una gran importancia, el de Sienna Brooks, cambiando sus intereses, y lo que es más preocupante, mutilando el final del libro a su gusto de manera maniquea, incompleta, y carente de cualquier sentido de coherencia.
No vamos a contaros (tendríamos que hacer spoilers) con detalle en que Koepp mutila el personaje que salva de manera correcta Felicity Jones, pero solo os diré que no explica nada de sus razones para hacer lo que hace, y sobretodo lo deja al final como alguien que no es realmente el de la obra de Brown. Realmente lastimoso.
Aparte del desastre del guionista con la doctora Brooks, cambian un hecho muy importante que ocurre en la parte del desenlace, hecho que tiene que ver con el virus y su propagación, detalle que merma el final de la peli y secciona el mensaje (referido al tema de la super población) que debería ser lo que quede del film al acabar de verla quedando diluido por el happy ending (final feliz) que no existe en el libro.
Como le oí decir hace poco al gran crítico Toni Vall (8 al día, Fotogramas,...), " no entiendo como el mismo director que ha hecho la película de los Beatles , Eight days a week, pueda haber hecho esto".
Secundo perfectamente lo que Toni dice, porque donde en una producción todo está milimetrado hasta el infinito. en la que nos ocupa,en cambio, lo único que parece importar es que el ritmo y sucesión de imagenes deslumbre al espectador para que no se le vean las costuras o quizás más bien las roturas que un mal guión dejan al descubierto.
Nos encontramos ante un film en el que una buena escena inicial con gran fotografía de Salvatore Totino, cae de manera repetitiva, en hacer lo mismo que en anteriores adaptaciones. Un corre calles (en parte responsabilidad de Brown) a cada momento que pasa más inverosímil, un poco de locura está bien, demasiada es dañina para la credibilidad para la película. y que al final, lejos de conseguir lo que busca, que no pensemos en lo superficial de todo, nos hace desconectar de lo que nos presentan en pantalla.
La B.S.O de Han Zimmer es realmente otro punto olvidable de esta producción, porque no arriesga en absoluto en referencia a sus trabajos anteriores con Howard, limitándose a solo remixtear el tema main title más conocido en diversas escenas del film.
O sea, y para terminar, resumamos en que estamos ante la más floja adaptación de una obra de Dan Brown hecha hasta ahora, mutilada en parte por el guión de David Koepp, donde se carga uno de los personajes clave del libro y el final del mismo, donde salvo Jones, y algún secundario (Khan) los actores no acaban de rendir al nivel adecuado, y donde el ritmo acelerado de la trama y escenas de acción no tapan el desaguisado total que ha dirigido Howard, parece más por exigencia del contrato que él y Tom Hanks tienen firmado. Cuando las cosas se hacen más por obligación que por deseo, mal vamos.
Calificación de Inferno : 4 sobre 10