Desde estas lineas, doy mi pésame mas profundo al pueblo alemán por tener entre sus ciudadanos a semejante ilustre embaucador de serpientes, el Sr.Ronald Emmerich, el cual es verdad que no engaña a nadie, ni esconde sus cartas, en eso es sincero. Lo suyo no es el cine, lo siento, empezó sus andanzas con pelis al estilo Soldado Universal(serie B total), siguió con una de las pocas que puedes ver sin que te entren nauseas, Stargate(creo yo su mejor película), y creo que después de esa, lo demás ha sido catástrofe tras catástrofe, Independence Day (viva America), Godzilla, 10.000 AC, o El dia de mañana, todo eso antes de su broma final 2012. Por mala suerte para mi persona, decidí ir a verla, sabiendo que me esperaba un sinfín de efectos visuales, y poca cosa más, aderezado con el descenso al infierno de un actor como John Cusak, el cual en una entrevista hace poco decia:" prefiero hacer una película con Woody Allen que con Emmerich", anda y yo. Penoso en su actuación, no transmite nada en pantalla, de echo como el resto del elenco,de segundones estilo Danny Glover(ay amigo quien te ha visto y quien te ve desde Arma Letal)aquí en la piel del presidente de los EEUU, el cual asiste pauperrimo a la destrucción de la Casa Blanca, sin poder evitarlo.
El guión, (he dicho guión), perdón el panfleto en que se basa estos 150 minutos y pico,seguramente no pasarian la censura en un país cuerdo,por eso en Hollywood si lo aceptaron, seguramente a la primera. Típica história vista hasta la saciedad de una pareja que está separada por los caracteres de ambos, pero que en este caso por la destrucción futura de la tierra, encontrarán el camino para reencontrarse. Penoso. No trasmite en ningún momento la emotividad que intenta recrear entre famílias, padres que intentan arreglar sus problemas, heroes sin nombre que intentan salvar vidas, que emotivamente yanki, que vomitivo todo en su conjunto.
Efectos? todos los que querais y más, ese es el problema que hay tantos que te hartas de ellos. Dejad el cerebro en casa si optais por ver "esto" porque llamarlo película sería un insulto que deberia ser castigado con la inyección letal para el que cometa el error de llamarlo así.
Pido encarecidamente al gobierno alemán que en caso de que no hayan barajado la posibilidad de retirar la nacionalidad alemana al Sr. Emmerich, que se lo vayan pensando. Da grima pensar que este señor sea de tu misma nacionalidad, yo si fuera así me haría subdito del Pakistan.
No puedo,lo siento, recomendar este film,dado que mi decencia no me lo permite,almenos de eso tengo de sobra, no como otros (Emmerich). Os digo sin temor a equivocarme, que son los 5 €(hoy era dia del espectador)mas mal gastados de mi vida. A veces hay que hacerle caso a tu instinto y no dejarte llevar por la propaganda que nos inunda con cagarrutas de este nivel.
NOTA: 0 de 10( y porque no hay negativos,que sino!)
Me niego a poner el trailer.
Bueno, bueno, pero que destroyer estas! aunque no te falta razón. Es penoso reirse viendo como un avión pasa por debajo de dos edificios cayendose y como la gente muere a tropeles, pero es que parece un circo con los acrobatas saltando. Excesivo y, porque no decirlo, poco ético ¿Hasta dónde puede llegar Hollywood en pro del espectáculo? Un drama como es la destrucción del mundo con millones de muertes llega a parecer una comedia. Mal, muy mal. De acuerdo con el 0 de 10.
ResponderEliminarPepus
Pelicula que ni los amantes del cine de accion y de imagenes espectaculares deben ver. Yo soy uno de ellos y os puedo asegurar que es una pena de pelicula. Verla es una perdida de tiempo y si escuchas los dialogos y piensas en el guion te dan ganas de vomitar. No la veais, ya tenemos sufiente basura en la cabeza.
ResponderEliminarDe verdad, ABSOLUTAMENTE DEACUERDO.
ResponderEliminarQue bazofia, que asco de película.
El último diálogo al final de la película, en el que esa niña GILIPOLLAS le pregunta al padre que "Cuando volverán a casa?", es para cagarse encima; sobretodo cuando la niña, tras las respuesta del padre añade:"ya no necesito usar más los pañales-nocturnos" jajajaja, PATÉTICO.